lunes, 31 de mayo de 2010

Los elefantes no muerden


No, no voy a hablar de biología , ni de animales…Quiero hablar de las elecciones diarias, de esas que hacemos a veces hasta sin darnos cuenta, y que, sin embargo, influyen en nuestra vida.

Nuestras elecciones pueden ser nuestras mejores amigas o nuestras peores enemigas. Nos pueden guiar hasta nuestros objetivos, o bien lanzarnos al espacio, lejos de nuevos logros o de un estado de paz interna, que todos necesitamos.

Todos en nuestra vida existe debido a un acto de elección hecho previamente. Cada elección se inicia con un comportamiento que luego puede transformarse en hábito. Elegir mal, nos lleva a otra situación en la que deberemos elegir, y, seguro que esta vez será más difícil de resolver.

Cada decisión, por pequeña que sea, altera la trayectoria de nuestra vida, como seguir estudiando, con quien casarse, tomar una copa de más antes de manejar , permanecer callados en medio de una charla ,comer pollo asado o una milanesa…, y todas y cada una de ellas, tendrán algún impacto en nuestra vida.

De por si, nadie tiene la intención de ser obeso, quebrar su negocio, divorciarse, pero a menudo (aunque no siempre) estos hechos dependen de decisiones más o menos pequeñas, del día a día. Con esto quiero hacer referencia a acciones que hasta pensamos que no estamos tomando; por ejemplo, cuando tomamos una gaseosa con un paquete de papas fritas sin pensar y luego al tomar la última papa del paquete, nos damos cuenta que hemos tirado por la borda tres semanas de régimen… Es en esos momentos que tratamos de congraciarnos con nosotros mismos pensando, “y bueno,….son sólo unas papitas….; no como a la noche y listo”, en otras palabras, no nos hacemos cargo de nuestra decisión.

Esto me hace acordar de una frase que leí “Los elefantes no muerden, los mosquitos sí”. Pensando en ella es que pensé en cuantas veces no nos hacemos cargo de nuestras elecciones, porque fueron justamente pequeñas elecciones las que nos llevaron a esa situación en la que no queríamos estar.

Por eso, siempre es buena una pausa para pensar en las consecuencias de nuestras “pequeñas elecciones”

Y a vos ¿qué te pasa cuando tenés que elegir?

¿Cuándo te resulta más difícil hacerlo?

¿Te encontrás atrapado a veces en ese no pensar antes de elegir?

¿Cuánto han influido tus elecciones impensadas en tu situación actual?

Espero tus comentarios…

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